¿Qué es el apego?

El apego es el vínculo que refleja el lazo o unión afectiva duradera que se establece en el espacio y en el tiempo entre el bebé y su cuidador. Lo que el bebé busca principalmente, a través de ese vínculo de apego con su cuidador principal, es seguridad.

El hecho de que una persona permanezca en la vida del niño y sea capaz de mostrarse sensible, satisfaga sus necesidades y muestre empatía hacia él, favorece que el bebé experimente sensaciones y emociones internas de calma, alivio, satisfacción y como consecuencia que cree un esquema mental sobre sí mismo seguro.

“ Ser padre o madre es una forma de temprana de transmitir al bebé la clase de mundo que hay ahí fuera: ¿Es un mundo en el que recibes tranquilidad, calma, satisfacción, alivio a tus necesidades, que te comunica seguridad, que te transmite que puedes confiar en los demás? ¿O es un mundo que te comunica desconfianza, hostilidad, inseguridad, intranquilidad y que has de pelear forzosamente por la satisfacción de tus necesidades? “.

El proceso de creación del vínculo de apego es universal y en el participan tanto el bebé como las características y forma de ser e interactuar del adulto. Es importante tener en cuenta que el adulto activa sus propios recuerdos inconscientes en relación a sus primeras experiencias con sus figuras de apego y actuará conforme a estos. Además también influye en este proceso de creación lo que la cultura dice sobre cómo criar a un bebé.

El vínculo de apego se desarrolla entre los 0 y los 3 años y comprende:

Componente cognitivo: creencias, pensamientos, actitudes, etc. relativas a cuestiones afectivas construidas a través de las experiencias de interacción con el cuidador y que posteriormente actuarán como filtro a través del cual la persona selecciona, analiza e interpreta sucesos de índole afectiva y determina las emociones y las conductas consecuentes.

Componente emocional: emociones asociadas al tipo de relación establecida y que incluyen al cuidador,  al bebé y a la relación entre ambos

Componente conductal: comportamientos visibles que el bebé activa ante necesidades biológicas y emociones para atraer a su cuidador y que éste satisfaga sus necesidades de seguridad, consuelo, protección..

A partir de la infancia, la capacidad para valorarnos, querernos, sentirnos seguros y confiados depende de manera importante de cómo nos han valorado, querido y de hasta qué punto nuestro cuidador principal nos ha trasmitido confianza y seguridad. Así inconscientemente en las relaciones posteriores sentimos y actuamos en función de este chip que nos acompañará toda la vida. Si la mayoría de la información que contiene este chip es de seguridad, la persona se ha construido sólidamente. El apego seguro dota a la persona de seguridad y solidez psicológica.

 

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